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La adivinación Katina toma su nombre de Katina, una médium que vivió en Izmir durante el período de la antigua Roma.
La razón por la que Katina ha podido hacerse un nombre después de todo este tiempo es la misteriosa historia transmitida de boca en boca.
es su vida. Hasta donde se sabe, ella es una viuda adinerada. La desaparición de su esposo y, por consiguiente,
El misterio de que se la diera por muerta llamó la atención sobre Katina. En el distrito de Katina...
Personas vivas comenzaron a difundir diversos rumores y afirmaron que ella había matado a su marido.
Ellos duraron.
Hay una historia misteriosa y triste detrás del surgimiento de la adivinación de Katina.
La señora Katina es una mujer llena de secretos y hasta su muerte sostuvo que su marido no estaba muerto.
La casa donde vivía es sombría y exótica. Pinturas al óleo del día en que desapareció su esposo.
Empezó a dibujar. Las pinturas de la señorita Katina, quien nunca antes había estudiado pintura, son asombrosas.
Muy bueno y profesional. El verdadero misterio comienza aquí mismo. Katina está en la agenda hoy.
Dibujó las tablas utilizadas. Según su afirmación, la misteriosa figura de su esposo aparece en el cuadro que dibujó.
yace el secreto de su desaparición.
Tras este suceso, surgen rumores y se mencionan las pinturas. La gente está fascinada con este misterio.
Tienen miedo y acusan a Katina de brujería.
La influencia de la época intolerante se manifiesta y Katina, acusada de ser bruja, es asesinada sin juicio.
Muere quemada. Tras este amargo final, las pinturas de la señorita Katina desaparecieron misteriosamente.
Desaparece. ¿Quién y por qué compró las pinturas en tan poco tiempo, o mejor dicho, dónde?
Su desaparición sigue siendo un misterio.


La transferencia de la fortuna de la señorita Katina a las cartas en la adivinación de Katina es la siguiente.
Se considera. La afirmación es que Katina dibujó una copia pequeña de cada cuadro que dibujó en tarjetas.
En la dirección. Parte del misterio radica en por qué dibujó copias de las pinturas en las tarjetas.
Permanecerá. Quién sabe, quizá predijo la adivinación de Katina que se usa hoy y preparó sus cartas.